A menudo los responsables de las empresas centran sus esfuerzos en la captación de nuevos clientes, dejando en segundo plano a los clientes que ya tienen…
Pero para conseguir que un negocio crezca de una forma sostenible es muy importante establecer una relación duradera con los clientes que ya se han conseguido. Es lo que llamamos Fidelización.
En principio un cliente que nos ha comprado una primera vez, volverá a hacerlo si ha quedado satisfecho con el servicio recibido. Como afirma Cristina Berzal, directora de affilinet para España. «Los usuarios no separan el marketing del producto, ni el marketing de la experiencia que perciben a lo largo de cada interacción con la marca. Cada paso puede invitar a ejecutar una compra o a no volver a visitar la tienda».
Por eso es muy importante involucrar a Atención al Cliente para conocer exactamente el grado de satisfacción de quienes han comprado en nuestro negocio y detectar posibles necesidades para el futuro.
El cliente sentirá que queremos ayudarle y nosotros tendremos más posibilidades de realizar una nueva venta con éxito.
Fidelización debe ser sinónimo de satisfacción y confianza
Pero aún hay más, esos clientes satisfechos serán en muchos casos quienes nos traigan a otros nuevos. Hoy día las redes sociales ponen a nuestro alcance una serie de herramientas que ayudarán a difundir nuestra buena reputación. Se ha convertido en algo habitual acudir a la “red” para ver qué experiencias han tenido otras personas con una determinada empresa y lo que leamos tendrá un peso definitivo en la decisión de compra.
¿Qué valores crees que pesan más a la hora de establecer una relación de confianza entre empresa y cliente? Tu opinión nos interesa.